Del 22 al 24 de noviembre ha tenido lugar en la casa Fraterna Domus (Roma) el primer encuentro conjunto de la UISG-USG (Unión de Superioras/es Generales).
Fernando Cordero sscc ha asistido en representación de Alberto Toutin, superior general, que se encontraba en el Capítulo Provincial de Brasil. El lema de las jornadas: “Sinodalidad: una llamada renovada a la profecía de la esperanza”. Los 237 participantes han seguido el método de la conversación espiritual, “un camino estrecho” pero bien útil, en las 30 mesas redondas dispuestas en una gran sala.
El día 22, Arturo Sosa (“no nos corresponde hacer un mapa del camino, sino dejarnos conducir por el Espíritu”), Pat Murray y Mark Hilton compartieron su experiencia como participantes en el Sínodo sobre la Sinodalidad. Por su parte, Mary T. Barron (llamada a profundizar en la colaboración en la vida religiosa), Mauro Lepori (remover la tierra, sacar lo marchito y no urgir el fruto), Maria Nirmalini y Ernesto Sánchez comunicaron los contenidos del Sínodo que les habían parecido más importantes. Por la tarde, la pregunta que se trabajó fue: ¿Qué desafíos ves para la vida consagrada desde la experiencia sinodal? Hicieron sus aportaciones Elizabeth Davis, Tesfaye Gebresilaasie Tadese, Elysée Izerimana y el cardenal Robert Prevost. Salieron varios desafíos de su lectura del Informe Síntesis de la Asamblea del Sínodo.
El día 23, por la mañana hubo un encuentro con el papa Francisco de hora y media de duración en la antigua sala del Sínodo. El Papa pidió “no enjaular al Espíritu Santo” y afirmó que “el proceso de transformación ha de seguir adelante”. Respondió a 11 preguntas que se prepararon por grupos el día anterior sobre los más diversos temas, en los que habló con total libertad, como le caracteriza en este tipo de reuniones. Al finalizar el acto, el Papa saludó a los participantes. Fernando le dijo: “Santo Padre, nuestra Congregación de los Sagrados Corazones (Picpus) celebra hoy la fiesta de su Fundadora, Henriette Aymer. Lo celebramos meditando y rezando con su homilía ‘adorar y servir’ de la misa final de la Asamblea del Sínodo de octubre. Que sepa que rezamos mucho por usted y agradecemos su ministerio”. A lo que respondió el Papa: “¡Gracias, gracias! Sigan, por favor, rezando por mí”.
Por la tarde, se ha practicado por grupos de tres un camino de Emaús, dialogando sobre esta cuestión: ¿Qué signos de esperanza ves en nuestra sociedad y en la Iglesia? ¿Dónde están hoy los lugares que llaman a la esperanza? A continuación, Miriam Altenhofen y Miguel Márquez, han respondido con ejemplos concretos e inspiradores, de sus familias religiosas, a esta pregunta: ¿Qué significa para ti la llamada renovada a la profecía de la esperanza?
El viernes, 24 de noviembre, último día de la reunión se trató de ver qué podemos hacer en común como vida consagrada. La esperanza es algo que nos lleva más allá de donde estamos. Salieron diferentes propuestas que serán estudiadas por las ejecutivas de la UISG y de la USG: potenciar el estilo intercongregacional e intercultural, plantear acciones concretas en el campo de la salud, la paz y la educación, diálogo intercarismático, etc.
25/11/2023